I.- Pueblo y Senadores...

Me encuentro actualmente en ese estado en el que uno quiere negar algo, sólo que no sabe qué negar.

Estoy triste, una especie de tristeza altiva mezclada con apatía, y cierta repugnancia hacia el ser humano.

Es como estar en el limbo de las pasiones, en el canto de la moneda.

En estos momentos, se echa de menos ese algo que te hace arder por dentro.

Lo más parecido que encuentro es el odio. Como un veneno que se destila específico para destrozar. Pero que calma los nervios y despierta la mente.

Despierta la mente y desgarra el alma. Desconfianza. Amarga como la bilis. Se me había olvidado a qué sabía.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuidado con el odio, es cierto, es un veneno, pero a quien primero mata es a su dueño, no a la persona a la que está dirigido.

Me gusta como escribes...

Un besote!!

Silvia

Athos dijo...

Ay, ya lo sé... :)
Gracias
:***